Continuamos el camino al éxito que iniciamos en anteriores post con el primer paso, hoy es turno seguir avanzando hasta el segundo paso..

Acepta el Valor que imprime tu personalidad como un Ser único y ponlo al servicio de tu objetivo.

¿Alguien piensa que hay siquiera dos formas iguales de decir “hola”? ciertamente no; cada saludo, aunque sea hecho por diferentes personas y con la misma palabra, tiene un toque diferente y personal. El tuyo es genuino, quizás sea el tono, el timbre de voz, la delicadeza de tus formas, la vitalidad de tu palabra… tu “cuerda” forma la “orquesta” del mundo.

¿Eres consciente de cuál es tu Valor diferencial y cómo estás contribuyendo con él a que el mundo sea un lugar mejor?

Hoy te invito a que reflexiones sobre cómo sería tu entorno más próximo sin ese valor que tú encarnas y, si después de dicha reflexión concluyes que ciertamente sumas, te pido que desde la humildad sepas agradecerte tu gran aportación.

Pensar que tu aporte no es suficientemente bueno es simplemente una necedad; cuando no juzgas ni criticas tu valor y simplemente lo entregas con generosidad, el equipo del que formas parte (pareja, proyecto profesional, familia, etc..) se desbloquea y fluye de una forma sorprendente.

Si haces el ejercicio de repasar tu historia vital y localizar los momentos de más satisfacción y plenitud, comprobarás que han sido acontecimientos que quedaron fijados en tu alma, precisamente porque estaba presente ese Valor que todos reconocen en ti.

Admirar los valores que portan y aportan los demás nos hace mejores, porque sin darnos mucha cuenta los vamos incorporando en nosotros, sin embargo pensar que los valores de otros son mejores que los nuestros es la destrucción de tu autoestima y más allá de esto, la paralización del mundo.

Desde este espacio te pido, que hoy reconozcas tu valor sin juzgar ni comparar con otros, y le agradezcas desde la profundidad de tu ser que haya sido tu gran herramienta para enfrentar y superar los desafíos que la vida te ha ido colocando y que sin duda seguirá siendo tu gran apoyo para crecer con los retos que vendrán.

“Una cosa sé: sólo seréis felices quienes busquéis y descubráis cómo servir”. Albert Schweitzer.

Me encantará leerte sobre qué es lo que más valoras de ti mismo 😉